El ciclista esloveno consigue su 85ª victoria como ciclista profesional en la primera etapa de montaña en la Vuelta ciclista a España. Van Eetvelt, segundo en un sprint muy ajustado y Joao Almeida termina 3ª. Almeida, segundo en la general a 8″ y Mas tercero a 32″.
La Vuelta a España llegaba a territorio español, concretamente en Plasencia, en una jornada muy calurosa, máximas de 36º, que se iba adentrando poco a poco en la provincia extremeña y en el sur de España.
Primeros intentos de fuga:
En los primeros kilómetros de la etapa la fuga no se terminaba de formar pese a los primeros intentos que se iban sucediendo. Llegaba el primer puerto del día, Cabezabellosa, los intentos de fuga se seguían produciendo, pero la ausencia de dureza en este puerto hacía que la fuga no llegase a buen término.
Se coronaba Cabezabellosa y seguíamos igual que en Plasencia, con el pelotón completamente agrupado. Aprovechando el descenso, y para sorpresa de muchos, la fuga se terminaba de conformar con ciclistas como Almirail, Moniquet, Zana, Pablo Castrillo y Mikel Bizkarra. Al final del descenso la ventaja de estos ciclistas con respecto al pelotón era de 40 segundos.
La fuga comenzaba el Alto del Piornal con una ventaja de 45 segundos respecto al grupo de favoritos. A medida que iban se iba ascendiendo el puerto la distancia de la fuga aumentaba de manera progresiva, hasta alcanzar los tres minutos y 45 segundos al coronar el puerto.
El descenso de El Piornal comenzaba a jugar un papel importante. Era el equipo RedBull BORA el que comenzaba a comandar el pelotón, reduciendo la ventaja con la fuga, con la intención de que Primoz Roglic se alzase con la primera victoria de etapa en esta Vuelta a España. A falta de 100 kilómetros para la meta, la fuga ya estaba controlada por el pelotón.
Comenzaba un periodo de “calma-tensa” entre el descenso de El Piornal y la llegada al penúltimo puerto del día, el Puerto de Miravete, la distancia se conseguía estabilizar en los dos minutos. El pelotón se aproximaba a la penúltima dificultad montañosa del día.
Aproximación a Villuercas:
Se coronaba el Puerto de Miravete y se formaba la «fuga de la fuga». Eran Bruno Almirail y Pablo Castrillo los dos ciclistas que conseguían mantener el pulso al pelotón principal, los demás miembros eran absorbidos por el pelotón. El pelotón comenzaba una contrarreloj con la intención de poder coger a los dos fugados antes de la parte más dura del Pico Villuercas.
Los equipos de la general comenzaban a imponer un ritmo fortísimo y peleaban por hacerse con la posición para la entrada en la parte encementada. Llegábamos a la parte más exigente y era Pavel Sivakov quien decidía atacar con el fin de poner una mayor dureza a la ascensión final, el equipo RedBull BORA quedaba muy mermado, y era Roglic en primera persona quien tenía que dar la cara.
El grupo de los favoritos volvía a unirse y Felix Gall decidía atacar con el fin de sorprender y hacerse con la victoria, igual que hizo en el Col de la Loze el año pasado en el Tour. Los ciclistas del UAE, tanto Almeida como Yates, sufrían mucho y se descolgaban del grupo cabecero, aunque como es característico en Almeida mantenía su ritmo.
Imparable Roglic:
Roglic, Mas y Van Eetvelt conseguían algo de ventaja y coronaban la parte más dura con algunos segundos, respecto a los ciclistas perseguidores que habían quedado descolgados como Yates, Almeida, Skjelmose… Pese a esta ligera ventaja, algunos como Almeida o Landa conseguían entrar en el grupo de favoritos y afrontar el último kilómetro.
Era Primoz Roglic quién conseguía hacer una jugada maestra y tras el ataque de Landa, que conseguía cerrar Van Eetvelt, adelantaba al ciclista belga justo en la línea de meta y se hacía con su 13ª victoria de etapa en La Vuelta a España, perfilándose como el principal candidato a la victoria en la general.
Las incógnitas sobre el estado de forma del ciclista esloveno han quedado completamente disipadas. De esta manera ha presentado su candidatura a hacerse con su cuarta Vuelta ciclista a España, para tratar de igualar al ciclista Roberto Heras.
Julián Fernández Ortiz