Como escribimos ya hace unos días aquí, Mark Cavendish podría estar cera de su retirada. Sus ya 35 años, su falta de victorias de postín en los últimos 3 y sus múltiples lesiones, le dejan un panorama difícil para seguir en activo. Esto, añadido a la situación difícil por la que atraviesa el ciclismo y todo el deporte debido a la pandemia del COVID19, dejan al de la Isla de Man al borde del abismo.
Algo que su compatriota, amigo y compañero por muchos años, Bradley Wiggins lamenta profundamente:
No es la salida del deporte para un hombre que ha logrado lo que ha logrado, no es la salida que todos queremos ver. Queremos verlo salir en lo alto. Nadie realmente lo esperaba tampoco, nunca dijo que esto fuera así. Será su último año. Casi se siente como si le hubieran quitado la decisión y se ha convertido más en una decisión de otra persona en lugar de que Mark diga ‘aquí es donde me detendré
Estas eran las palabras del ganador del Tour en Eurosport sobre el posible mejor sprinter de la historia. Y seguía:
Es difícil porque siempre tienes una visión romántica de dónde quieres frenar tu carrera pero, conociendo a Mark, solo quiero verlo, no necesariamente con una victoria, sino solo una celebración de su carrera. No quiero verlo llorando al final de la carrera siendo forzado a retirarse
Como dice el bueno de Bradley, no es bonito ver a un ciclista de la talla de Cavendish teniendo que irse así. Es durísimo e injusto que el británico no pueda decidir cuando retirarse sino verse obligado a ello por sus problemas físicos y psicológicos. Eso sí, es algo que ya ha pasado anteriormente y que, por desgracia seguirá pasando. Desde aquí le deseamos la mejor de las suertes para 2021. Ojalá pueda retirarse alzando los brazos.
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Imagen extraída de: Daily Mirror.
Autor: Julián Fernández Ortiz (@jotadoce_)