El día de la bestia van der Poel

El neerlandés no deja indiferente a nadie. Fue a Hungría para la disputa de su primer Giro d’Italia con el objetivo de brillar, de buscar victoria de etapa y de vestirse, por segunda Gran Vuelta consecutiva, con el maillot de líder de la carrera. Y lo consiguió, a la primera oportunidad que se le presentó, Mathieu hizo una exhibición de sprint en una primera etapa sublime para ganar y endosarse con la característica Maglia Rosa, ¡Qué bestia van der Poel!

De las mejores primeras etapas de Gran Vuelta

La bestia van der Poel hizo gala de su superioridad, estaba entre los favoritos y no falló. En un final rápido y picando para arriba, se vistió de Rosa desde ya la primera jornada. El ciclista de moda, el eritreo Girmay entró segundo. Un sprint precioso para dar pistoletazo al Giro.

Con el pelotón casi entero y los equipos importantes tirando de él, todo se definió al sprint, donde él es poderoso. Solo hay que ver su más reciente victoria en el Tour de Flandes. Y hay que verlo a cámara lenta para apreciarlo bien. «Papá» Mathieu apareció para ganar en el último suspiró. De hecho, no estaba nada bien colocado, lo que le añade todavía más mérito.

Una nueva Contrarreloj sublime para retener la Maglia Rosa

Debía repetir la del Tour, salir con la cabra vestido de líder y bailar con las más feas, contra las manecillas del reloj. Saber sufrir en una modalidad que no entrena. Lo ha confesado él. ¡Y la bestia van der Poel lo hizo! Vestido de rosa, como cuando se exhibió con el amarillo Maillot Jaune. Con una espectacular bicicleta Canyon de ITT decorada para la ocasión. Mathieu fue capaz de mantener la Maglia Rosa. Solo un sorprendente Simon Yates impidió su segunda victoria consecutiva en su primer Giro d’Italia.

Algo que casi le da un doblete histórico al nieto de Poulidor, que intentó aprovechar su frescura, su forma, su motivación rosada y su habilidad en terrenos complicados, con curvas, para dar una nueva demostración de su clase. Pero se encontró con un inspirado Simon Philip, que da un primer golpe en la mesa ante todos sus rivales.

Objetivo cumplido

Fueron 24 horas para cumplir todas las metas, para demostrar una vez más que es uno de los grandes. Una figura mundial que ha sido llamado a marcar una época y él está respondiendo a esa llamada. El Giro ha visto cómo se las gasta Mathieu van der Poel.

No tendrá la capacidad de ganar una Gran Vuelta, pero estas exhibiciones se quedan en la retina del aficionado. Ha ganado etapa, vestido el amarillo del Tour y lo ha defendido. Ha ganado etapa, vestido la rosa del Giro y lo ha defendido. España aguarda.