La carrera española ha comenzado y tras la segunda etapa el comentario más repetido entre todos es: «¡Qué manera de empezar una de «las mejores» Vueltas a España!»
La Vuelta a España 2023 ha comenzado de la peor manera posible. El inicio de la carrera en el día de ayer, en Barcelona, con la CRE, acabó provocando enfado entre los corredores.
El primer equipo, el Caja Rural-Seguros RGA, abría el telón a las 18:55 horas, un horario poco común en la Vuelta a España, ya que por las horas anochece antes y por tanto, las horas de luz son menos. La lluvia llegaba como protagonista inesperado y también sumaba su granito de arena a la etapa.
El circuito urbano, con muchas curvas y encima mojado ponía en riesgo a los corredores. El tiempo meteorológico es un factor que no depende de los organizadores de la carrera. Sin embargo, los últimos equipos en salir a la carretera lo hacían sin apenas luz y es ahí donde llegaba la queja de los equipos. Uno de los más molestos era Remco Evenepoel que en su llegada a meta se quejaba ante los micrófonos de los medios de comunicación.
EL DESCONTROL CON LOS TIEMPOS EN LA SEGUNDA ETAPA
La lluvia se postulaba como protagonista en la segunda etapa de la Vuelta, de nuevo en la ciudad de Barcelona, con la ascensión a Montjuic a 3 km para meta. Los corredores se reunían para buscar una solución que no pusiera en peligro sus integridades.
Finalmente, los organizadores decidían que: «Los tiempos para la clasificación general de la etapa se tomarán finalmente a 9 kilómetros del final, antes de la entrada en el circuito de Montjuïc, pero las bonificaciones se mantenían en el alto de Montjuic y en línea de meta».
Esto provocaba que se tuviera que colocar una pancarta para marcar los tiempos a 9 km de meta; en cambio, la organización iba a instaurar un descontrol. En el paso de los corredores, todos desconocían los tiempos y únicamente se sabía que Andrea Piccolo era nuevo líder de la clasificación general.
Otra de las imágenes en esta segunda etapa llegaba cuando el pelotón marchaba a buen ritmo y tras la caída de Roglic en la parte delantera del pelotón provocaba que Jonas Vingegaard junto a Dylan Van Baarle se pusieran al frente del grupo para mandar parar a los corredores del DSM.
BOICOT CON CLAVOS EN LA VUELTA
Además, unos manifestantes boicotearon la carrera colocando unos clavos en la carretera que provocaron numerosos pinchazos entre los hombres del pelotón, pero en esto poco puede hacer la organización si existen unas personas que quieren hacer el mal a los ciclistas.
La carrera continúa y aún quedan 19 etapas por disputar pero, ¡qué manera de empezar una de «las mejores» Vueltas a España!