La primera de las Clásicas de las Ardenas, la clásica neerlandesa por excelencia y una de las pruebas con más atractivo de la primavera por su recorrido compuesto de un gran número de cotas duras y encadenadas. En la Amstel Gold Race tenemos las subidas al Keutenberg y Cauberg, los más destacados con pendientes que pueden llegar a los 22% de pendiente media, todo un espectáculo para el aficionado, que se deleita viendo como los más grandes de este deporte se han retorcido en estos durísimos repechos.
La Amstel, una carrera de pura concentración
Es una clásica joven en comparación a sus hermanas mayores. Con 58 años, la primera edición de la Amstel Gold Race nació en 1966 celebrándose en abril y estuvo a punto de no poder organizarse por tratarse de un complicadísimo y laberíntico recorrido entre Utrecht y Meerssen de más de 280 km que provocó cambiar a la organización varias veces el itinerario con los corredores en carrera, ya que no tuvieron en cuenta los giros continuos que tenía que efectuar el pelotón para sortear los ríos. Algo surrealista en los tiempos que corren.
Y es que correr en Países Bajos tiene esta dificultad. Estas frías tierras no tienen grandes carreteras, todo lo contrario, los giros son sinuosos y muy técnicos. No sabes lo que te espera a la vuelta de la esquina. Siempre con dificultades de encontrarte algún vado, andén, hueco o coche mal aparcado, que obliga a cualquier corredor a no perder la concentración en todo momento.
Hoy día la competencia discurre entre Maastricht y Valkenburg, unos 250 kms en los que los ciclistas han de salvar 33 cotas o muros por carreteras estrechas y serpentuosas. Estas subidas cortas y explosivas poco habituales en el país neerlandés, invitan a contemplar un terreno nada llano y poco habitual, dándole un toque muy especial. Una prueba de continuo sube y baja, sin descanso, perfilada por numerosas rotondas e isletas, algo que la hace muy complicada y técnica, en la que los frenazos y arrancadas son constantes.
Mathieu van der Poel juega en casa
El máximo favorito es sin duda ‘La Bestia‘. ‘Papá‘ Mathieu está siendo el dominador de esta linda primavera. Ganador de la Amstel Gold Race en 2019 sin duda que quiere hacer respetar su territorio, ganar en su país con el maillot de arcoíris como flamante Campeón del Mundo y conseguir algo que nunca se ha visto, campeonar en Flandes, Roubaix y la Amstel; Bélgica, Francia y Países Bajos en una misma temporada, otro hito para la historia de este bello deporte.
Además, van der Poel tiene ante si la la posibilidad de entrar en una selecta lista de ciclistas que han logrado ganar tanto el Tour de Flandes como la Amstel Gold Race en la misma temporada. Entre estos nombres se encuentran leyendas del ciclismo como Eddy Merckx, Jan Raas, Philippe Gilbert y Tadej Pogačar. Si ‘Papá‘ puede añadir su nombre a esta distinguida lista, no solo consolidará su posición como uno de los ciclistas más talentosos de su generación, sino que también escribirá un nuevo capítulo en la historia del ciclismo neerlandés.
¿Lo consigue o no? ¡Se aceptan apuestas!
[…] Gold Race Experience, que se ha convertido en el lugar de salida y llegada de las rutas de la Amstel Gold Race. Valkenburg aan de Geul, a 12 kilómetros del centro de Maastricht, es el ‘pueblo […]